Días atrás durante
un proceso de consejería prematrimonial, mientras conversaba con la novia quien
había experimentado un divorcio y ahora, después de varios años, se disponía a
enfrentar un nuevo matrimonio, ella expresó lo siguiente.
“No
quisiera volver a fracasar”
Y me di
cuenta de que este es un pensamiento común de aquellos quienes han pasado por
un proceso similar.
Ahora, ¿Por
qué catalogan esto como un fracaso? Por la sencilla razón de que se plantearon
metas y proyectos pero los mismos no fueron alcanzados. Pero ¿es justo
catalogarlo de fracaso? Veamos.
Nos han
vendido tanto la tesis del éxito que pensamos que todo lo que hacemos debe
llegar a feliz término, pero esta no es la realidad, pues no podríamos
catalogar de fracasado a aquella persona quien ha luchado para alcanzar una
meta y simplemente debido a agentes externos a ella no lo ha logrado.
Por ejemplo:
un día mientras trabajaba en la empresa petrolera se nos asignó la limpieza de
un intercambiador de calor, pues este equipo acumula en exceso minerales, al
ver el equipo muchos de los otros profesionales comenzaron a hacer sus planes y
cálculos para lograr la labor asignada, yo por el contrario pedí un juego de llaves,
saque dos de los grandes tornillos del equipo el cual estaba cubierto del
poderoso sarro, uno lo llevé al taller para
realizar el proceso lo cual fue sumamente costoso, y luego presenté
ambos tornillos ante la gerencia informándole los costos y el porque era mucho
más económico y rápido fabricar un nuevo equipo. Podríamos catalogar como un
fracaso el proyecto asignado, pero la realidad es que yo hice todo lo
necesariamente importante para el logro del mismo, y aunque el proyecto no fue
realizado, ni para mí ni para mi empresa fue un fracaso.
Entonces, no
ha fracasado quien no ha logrado el éxito esperado, sino aquel quien no ha
hecho todo lo imposible para lograrlo.
Ahora, Analiza
tu supuesto fracaso a la luz de esta declaración.
¿Qué fue lo
que ocasionó tu divorcio o tu separación o la ruptura de tu relación? Cuando ves
tu vida en pareja de seguro podrás observar los muchos esfuerzos que hiciste
para mantener a flote la relación.
Y mientras tú
hacías miles de cosas para que todo funcionara tenías un cónyuge inmaduro haciendo
todo lo contrario.
Es imposible
no auto culparse de la perdida de una relación, pero la realidad es que
mientras usted está luchando por sacar adelante el matrimonio el cónyuge
traidor está haciendo todo lo necesario para impedirlo.
Resultan determinantes
las mentiras del cónyuge quien se justifica a toda costa, y que usted cree. Es muy
común escuchar, “es que yo….” O “si yo hubiese…”
Pero la
realidad es que nada de lo que diga o nada de lo que usted haya hecho justifica
la traición.
Por ejemplo:
si yo le golpeara a usted, usted tendría muchas formas de reaccionar, podría
golpearme también, o podría salir corriendo, llorar, quedarse callado, o
reaccionar preguntando por que hice eso, en fin existen muchas formas de
reaccionar pero es usted quien decide cómo hacerlo.
Ahora cualquiera
de las excusas que su cónyuge tuviese para justificar su extravió ninguna es
determinante pues siempre habrá otra forma de reaccionar.
El dirá lo
hice por…..
A ver ¿Cuáles
son la excusas más comunes?
No me
atendía
No cocinaba
No tenía la
casa limpia
No aportaba
dinero para la casa
No conversaba
No me daba
sexo
Y muchas
excusas más…
Pero ninguna
de estas excusas son válidas, es usted quien le da valides o las rechaza, pues
siempre hay una forma diferente de reaccionar, pero el traidor o traidora ha
decidido tomar esa vía mucho antes de que usted luche por salvar la relación,
es imposible salvarla ya él o ella ha decidido que el proyecto fracase.
Para finalizar,
tú no has fracasado, tu hiciste todo lo necesario para el logro del proyecto,
el fracasado fue él o ella quien trabajo en contra del éxito.
Bendiciones
estoy a sus órdenes
el inmaduro que trabaja en contra de la relación!! me encanto esta idea!!.
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